El EPS

El EPS (Expanded Polystyrene por sus siglas) o poliestireno expandido es un material plástico espumado y ligero, derivado del Poliestireno (PS), que no es más que un polímero termoplástico que se obtiene de la polimerización del estireno. En los países de habla hispana se conoce al EPS por varios nombres como: Anime, Telgopor, Estereofón (Styrofoam), Tecnopor. Unicel , Espuma- flex, Porespan, entre otros.

La primera produccion industrial de poliestireno fue realizada por la empresa alemana BASF en 1930, y en las décadas siguientes fueron inventados sus derivados. Desde entonces los procesos de producción han sido mejorados sustancialmente y el poliestireno se ha convertido en una industria sólidamente establecida, alcanzando en el 2000 una demanda global de unos 13 millones de toneladas anuales.

El poliestireno expandido es un material fabricado por varias empresas en todo el mundo. El proceso se realiza partiendo de compuestos de poliestireno en forma de perlas, que contienen un agente expansor (habitualmente pentano).

Después de una pre-expansión, las perlas se mantienen en silos de reposo y, posteriormente, son conducidas hacia maquinas de moldeo. Dentro de dichas maquinas, se aplica energía térmica para que el agente expansor que contienen las perlas se caliente y estas aumenten su volumen, a la vez que el polímero se plastifica. Durante dicho proceso, el material se adapta a la forma de los moldes que lo contienen.

Frecuentemente, su cualidad más destacada se relaciona con su higiene, al no constituir sustrato nutritivo para microorganismos, es decir, no se pudre, no se enmohece ni se descompone, lo que lo convierte en un material idóneo para la venta de productos frescos. En los supermercados, por ejemplo, lo encontramos fácilmente en forma de bandeja en las secciones de heladería, pescadería, carnicería, frutas y verduras.

No obstante, en la actualidad, una de las aplicaciones más importantes del versátil y duradero poliestireno expandido o EPS es la de aislante térmico y acústico en el sector de la construcción, utilizándose como tal en fachadas, cubiertas, suelos, etc.

Otras características reseñables que debemos destacar son su ligereza, resistencia a la humedad y capacidad de absorción de los impactos lo que amplía el espectro de usos del EPS y lo convierte en un excelente material de relleno para suelos, un acondicionador ideal para la protección de productos frágiles, y una insuperable herramienta para revestimientos de tuberías, entre otros.

EL EPS y el ambiente

Las cualidades del EPS como aislante térmico usado en la construcción, lo convierten en uno de los primeros materiales que contribuyen directamente con la disminución del consumo de energía en cualquier tipo de edificación (viviendas, empresas, centros comerciales, fábricas, etc.) y, por ende, con la reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera.

Además, el proceso de fabricación del EPS requiere de un bajo consumo de energía y no emplea ningún producto que ataque a la capa de ozono. Por otra parte, el poliestireno expandido es auto- extinguible, es decir, no propaga las llamas, puesto que contiene un agente ignifugo. Expuesto al fuego, la carga combustible es mínima en relación a la mayoría de los materiales componentes de una edificación.

Al ser un material estable e inerte química y bacteriológicamente, no produce ningún impacto de polución al entrar en contacto con las aguas o capas freáticas. Más importante aún, el EPS es 100 % reciclable, ya que, tanto de las piezas fabricadas como de sus residuos, puede obtenerse aprovechamiento energético y los mismos pueden mezclarse y reutilizarse para formar nuevas piezas.